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1 nov 2015

MI MASCARA




Mi máscara desnuda

Mientras medito mi alegato
ante mi máscara desnuda
el mundo sigue andando 
sin confesiones valederas.

Sin otro sueño que lograr ofrendas
fingiendo ante mi misma
un mundo que desvía mis creencias
emplazo a la verdad en mi palestra.

Deseosa de mirarme en el espejo
con mi rostro sincero
encuentro que el camino que he elegido
está siendo poblado de mentiras.

Mentiras disimulos y antifaces
en cada contingencias que he vivido
montando una obra de oropeles
que alcance a ser vivida como cierta.

Y nada de lo visto me contenta
he sido descuidada en mi propuesta
 descifro las entrañas de los huecos
 destierro mi pantalla de apariencias.


Beatriz Ojeda

Derechos reservados 


19 ago 2015

¿QUÉ MÁS ME PUEDES DAR?




¿QUÉ MÁS ME PUEDES DAR?

Hoy sé que en nuestro mar
navega la esperanza.
Entre sus aguas claras iremos a la aurora
en una cama blanca cubierta de azucenas.
Allí nos cubriremos de sol y luna llena.
Tú   con tu boca dulce
yo  con mi boca ardiente
haremos un concierto regado de licores
que embriaguen los luceros.
Tu boca me destierra a grandiosas galaxias
me sumerge en prodigios
me adormece en el viento
y me deja repleta inhalando tu fuego.
Qué más me puedes dar que tu boca ambiciosa
si en ella está sellada la voz de tu alimento
la dulzura
la espera
la delicia de hurgarte en el hueco vehemente
donde vive tu amor esperándome siempre.

Beatriz Ojeda
Derechos Reservados

6 ago 2015

UN VESTIDO DE TUL



UN VESTIDO DE TUL 

En mi alma bordada de soledades viejas
un pájaro de cielo ha volado sin luz.
No sé por qué milagro se situó en la bisagra
de la puerta tallada con estrellas de plata
y quedóse observando  el telar de mi cruz.

Trajo en su pico rojo un camino de auroras
un laurel sensitivo  una ciudad febril
dejando en mi ventana una copa de vino
que embriagara mi alma con fragancias floridas
y luciera mi vida un vestido de tul.

Cantó mi flor primera una verdad augusta.
Grité /  lloré/  reí /   colgada de un pretil.
Ensayé mi victoria perfumando mis plantas
y calcé mis sandalias de encaje y terciopelo
para correr tras ella…la vida que temí.


BEATRIZ OJEDA
DERECHOS RESERVADOS