en ese dintel desnudo
aspirándote la muerte
se llevó tus ojos fríos.
Se llevó tus ojos fríos
en su canasto ciruela
y ya no puedes mirarme
con tus luceros candela.
Con tus luceros candela
extrajiste mis gemidos
aquella noche de fiesta
cuando el jardín florecía.
Cuando el jardín florecía
y embriagaba nuestro pecho
con azucenas y lirios
convertidos en suspiros.
Convertidos en suspiros
los deseos se volvían
helada nieve luctuosa
escondiendo tu partida.
Escondiendo tu partida
sin razón y sin mesura
sin verte morir, has muerto,
ya no existes en mi vida.
4 comentarios:
la negación hecha poema
excelente texto querida Bea
fuerza y despojo muy bien plasmado
besitos de luz
Beatriz...
la textura del sentimiento se enredan en tus versos como hiedra en la pared...
exquisito!!
hermosos días amiga querida!!!
beso!!
(gracias por las palabras tan afectuosas que dejaste en mis letras!!!)
hola Beatriz,
me gusta mucho tu blog.
Bello poema.
me lo voy a copiar:
!!Exquisito !!
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