¿Por qué?
Temerle a la muerte
cuando camina conmigo
y deletrea en mi oído
que mortal yo siempre he sido.
¿Por qué?
Temerle a la muerte
si tiene sus mano viva
extendida para darme
una sensual bienvenida.
Seductora e inquietante
como mujer que cautiva
está siempre entrecerrando
sus ojos de pasión ira.
Muerte del día y la noche
de los gritos y el silencio.
Muerte que escurre sus llantos
y se embeleza con ellos.
Tiene la suerte de andar
por los caminos del cielo
y también puede rondar
por la vereda sin miedo.
Yo tengo mi propia muerte
tú tienes la tuya propia.
No te la presto un instante
tiene el sello de mi obra.
“Yo tengo mi propia muerte
y no se la cedo a nadie”
Temerle a la muerte
cuando camina conmigo
y deletrea en mi oído
que mortal yo siempre he sido.
¿Por qué?
Temerle a la muerte
si tiene sus mano viva
extendida para darme
una sensual bienvenida.
Seductora e inquietante
como mujer que cautiva
está siempre entrecerrando
sus ojos de pasión ira.
Muerte del día y la noche
de los gritos y el silencio.
Muerte que escurre sus llantos
y se embeleza con ellos.
Tiene la suerte de andar
por los caminos del cielo
y también puede rondar
por la vereda sin miedo.
Yo tengo mi propia muerte
tú tienes la tuya propia.
No te la presto un instante
tiene el sello de mi obra.
“Yo tengo mi propia muerte
y no se la cedo a nadie”
Copyright © Beatriz Ojeda
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